
Sorpresa del campeón y del líder: hay un nuevo rey del GP de Bahréin
De F1. Oscar Piastri se impuso desde la pole con gran autoridad en un mal día para Norris, que cometió otro error garrafal, aunque pudo minimizar pérdidas: Lando fue º pero podría terminar 2º por una sanción muy probable a Russell
Lando Norris llegaba a la cuarta carrera de la temporada, el GP de Bahréin de F1 22, en la primera posición del Mundial de F1 con un solo punto de ventaja sobre Verstappen.
Pero no fue el día de Lando y el bajón de Verstappen fue tremendo en un día en el que le pasó absolutamente de todo.
Y sí lo fue para Oscar Piastri, nuevo rey de Bahréin.
Lando, en una jornada llena de fallos, se salvó in extremis.
No pudo superar en pista a Russell 2º.
pese a su superioridad de coche y neumáticos, pero es probable que a Lando le otorguen ese segundo puesto por una posible sanción a Russell por un fallo técnico en su DRS, que se abrió cuando no debía.
De confirmarse, Norris habría logrado un 2º puesto con mucho sufrimiento, que pudo evitarse si hubiese estado más acertado.
Por contra, el que sí aprovechó a lo grande ese cochazo que es el McLaren fue Oscar Piastri, ganador de la carrera con contundencia desde la pole, sin desperdiciar ese cohete naranja y sin cometer ni un solo fallo, algo que contrasta con el fin de semana que se marcó su compañero.
CLASIFICACIÓN FINAL DEL GP DE BAHRÉIN DE F1 22
De esta manera, Oscar Piastri aprieta el Mundial, colocándose 2º a solo puntos del líder Norris a falta de la sanción a Russell que podría entregarle puntos más a Lando.
y da un golpe definitivo sobre la mesa para dejar claro que es firme candidato a la corona ante Norris y un Max que necesita muchas mejoras en su Red Bull si quiere defender su trono.
Todo ello, después de un triunfo incontestable de Oscar ante un Norris que tuvo un día esperpéntico.
Oscar Piastri, ganador del GP de Bahréin de F1 22
Oscar no tuvo rival y llama a la puerta de la capitanía de McLaren y de la lucha por la corona: suma 2 triunfos y dos poles en 4 carreras y vive un estado de forma mucho mejor que el de su compañero.
Piastri ganó ante un consistente George Russell 2º, pendiente de sanción.
y un Norris que solo pudo ser º, por delante de Leclerc 4º.
y Hamilton º.
pese a que la carrera le dio a Lando múltiples opciones de por lo menos minimizar pérdidas.
Pero si al inglés le hubieran dado un helado este domingo, se le hubiera caído antes de la primera cucharada.
Eso explica su día.
Oscar Piastri lo bordó.
Hizo la pole, salió bien y defendió el primer puesto en los primeros metros ante George Russell y tampoco le tembló el pulso tras el único coche de seguridad de la carrera, que apareció a 2 giros para el final.
En la reanudación de la prueba, el McLaren tampoco sufrió ante un George que se la jugaba poniendo neumáticos blandos, ya que no le quedaban más medios y el duro no funcionaba en esta pista.
Eso le daba a Leclerc y a Norris la oportunidad de poder maquillar el resultado final.
Antes de ese Safety, Piastri lideraba ante Russell, Leclerc y Norris y en esa lucha solo quedaba la emoción de ver si Lando podía quitarle el tercer puesto a Charles, que le había superado anteriormente con un neumático más joven.
Pero con los coches reagrupados y con gomas nuevas, todo podía cambiar.
Piastri se escapó hacia el triunfo.
Quedaba la duda de saber si Russell podía aguantar tantos giros con una goma blanda y si Norris remontaría.
Oscar Piastri, en el GP de Bahréin de F1 22
Y ahí llegó otra sorpresa: Norris volvía a fallar.
En lugar de atacar a Leclerc para colocarse tercero e ir a por George para minimizar pérdidas o incluso soñar con la remontada, era superado por Hamilton.
Y llegó otro error más de Lando: al superar a Hamilton, lo hizo por fuera de la pista y debía devolverle posición a Lewis.
En la vuelta 8, Norris lograba superar al 7 veces campeón para colocarse de nuevo 4º, pero ya a más de segundos de la cabeza.
Luego, fue a Por Leclerc con mejor ritmo, pero cuando llegó a él, se pasó de frenada en la curva 1 y bloqueaba neumáticos.
Un adelantamiento rápido y fácil, se le atragantó demasiado.
Tuvo que esperar a hacerlo cuando quedaban vueltas.
La siguiente parada era Russell, con un neumático blando muy tocado.
No debía sufrir para pasarle, pero no lo consiguió.
Tuvo suerte Norris de que George tuvo un problema con el DRS que le podría costar ese 2º lugar.
Russell, con gomas muy gastadas, podía defenderse y cerrarle la puerta a un Lando que también debe mejorar en sus ataques cuerpo a cuerpo, con demasiadas dudas.
Todo ello fue el ejemplo claro de otro mal fin de semana de Lando en el que desaprovechó tener en sus manos el mejor coche actual en la F1.
Ya falló en clasificación siendo 6º mientras su compañero lograba la pole.
Y cuando parecía que se redimía con una gran salida, del 6º al º, sus opciones se esfumaban por otro fallo más, un error garrafal que no se puede permitir un aspirante a campeón: en la parrilla de salida, Norris había colocado su coche adelantado, fuera de las marcas de la caja pintada en el suelo.
Verstappen, su oponente por la corona, demostró estar muy por encima de Lando y controlar todo lo que pasa en carrera al darse cuenta de esa posición a pocos segundos del arranque.
En lugar de estar centrado en la salida, detectó esa infracción, avisó por radio y forzó que a Lando Norris le cayeran segundos de sanción.
Ahí, Lando dijo adiós a sus opciones, que ya se estaban quedando en nada en pista al ver que, pese a la superioridad de su McLaren, era incapaz de superar a Russell en los primeros giros.
Norris paró, cumplió sanción en su parada e intentó remontar.
Y cuando el coche de seguridad le daba una segunda oportunidad, también falló.
Un desastre.
Aunque para desastre el de Verstappen.
El neerlandés tuvo problema de frenos durante todo el fin de semana y se repitieron en carrera al volante de un coche que además es muy difícil de conducir.
No pudo hacer más en clasificación que ser 7º.
Y en carrera, todo le fue en contra: su primera parada fue mala por un fallo en la luz del semáforo de su mecánico, que le hizo perder unos segundos clave.
Y para colmo, el neumático duro que puso no funcionaba en esta pista.
Luego volvió a parar para quitarse esa goma dura, pero el pit stop fue malísimo, de 6.
2 segundos.
Y además, tras esa parada salió el coche de seguridad, que le dio parada gratis a sus oponentes.
Pese a ello, Verstappen pudo minimizar daños siendo 7º, poco botín para el actual rey de la F1, que no tiene coche suficiente como para ganar.
Puede marcar diferencias en pistas como Suzuka, pero no en la gran mayoría.
Necesita una reacción rápida de Red Bull para tener más armas para defenderse de los McLaren.
Si la cosa sigue así, el Mundial es cosa de dos.
Carlos Sainz tuvo que abandonar a falta de 1 giros por un boquete en el lateral de su coche, un enorme agujero que dejaba al descubierto los radiadores del coche debido a un impacto que quedó impune de Tsunoda, que le volvió a golpear por detrás poco después.
El madrileño arrancó muy bien, ganando dos puestos en la salida y llegó a ir 6º.
La degradación de las gomas le complicó la cita, pero optaba a los puntos.
Debía defenderse del japonés, pero acabó sin premio por ese choque.
Los daños con los que competía Carlos Sainz tras el impacto de Tsunoda
Por su parte, Alonso terminó 16º.
Con un Aston Martin con mal ritmo de carrera, con tantos problemas en curva lenta y sin opciones de defenderse en recta por su mala velocidad punta, no tuvo opciones de puntuar y no pudo hacer otra cosa que perder puestos.
El ovetense ya avisaba el sábado que su 1ª plaza en clasificación era irreal.
Había sacado más petróleo del que había en su coche y dejaba claro que, al contrario que en Suzuka, en Bahréin sí había degradación de gomas y sí se podía adelantar.
Luchó con una espada de madera.
Sin opciones, a la espera de que Aston Martin presente unas mejoras más que necesarias para que Alonso pueda pelear por los puntos