Leclerc desafía a la lógica en un inicio accidentado en Mónaco
El piloto local, ganador el año pasado, lideró los Libres 1 con un Ferrari que no ha empezado bien la temporada, superando a Verstappen y Norris
Hace un año, lloraba de alegría al conseguir romper su mala racha en Mónaco y lograr por fin un triunfo con el que había soñado desde niño, en las calles de su ciudad.
Y ahora, un año más tarde, con un coche que ha empezado la temporada lejos de los triunfos y con muchos problemas, Charles Leclerc quiere defender su victoria donde creció, ante Verstappen y los McLaren.
El piloto de Ferrari comenzó el Gran Premio de Mónaco de F1 22 desafiando la razón.
Es cierto que el Principado siempre es favorable para Ferrari y que Leclerc siempre encuentra alguna décima extra ante su público.
Pero parecía complicado que el coche rojo se metiera en las quinielas para una pole, que en Mónaco es casi sinónimo de triunfo, debido a lo difícil que es adelantar, y que debería volver a serlo este año pese a la obligación de realizar dos cambios de neumáticos en carrera normativa que se estrena este año para añadir emoción estratégica a la carrera.
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**Clasificación de los Libres 1 del GP de Mónaco de F1 22**
Sin embargo, 'Il Principino' o 'Il Predestinato' , terminó la sesión con buen pie.
Eso sí, tras un inicio más que complicado en la FP1.
Primero, tuvo un incidente con Lance Stroll en los primeros minutos, originando la primera bandera roja del fin de semana.
Cuando aceleraba para atacar la curva del Grand Hotel, Stroll cambió de dirección, se metió en la trazada de Charles, que no pudo evitar llevárselo por delante.
Eso le dejó sin alerón.
Para colmo, cuando regresó a pista, se quejaba de algo extraño en su Ferrari: "No estamos en ningún sitio.
En las curvas hacia la derecha tengo subviraje.
Y a izquierdas, tiene sobreviraje".
Posteriormente, empezó a atacar, consiguiendo buenos cronos que le colocaron al frente.
Finalmente, Leclerc dominó la FP1 con una ventaja de "16 sobre Max Verstappen 2.
y "26 sobre Norris, con el Williams de Albon en la cuarta posición a ", Piastri en la con el otro McLaren a "78, Russell en la 6 a medio segundo, y Sainz en la 7 a "7.
Mucha igualdad arriba, aunque todavía es muy pronto para sacar conclusiones claras.
Max, que sufrió el año pasado con un Red Bull con muchos problemas en curva lenta, no esperaba que fuese "más fácil" esta vez en Mónaco, pero las mejoras introducidas en Imola podrían permitirle dar un paso adelante, especialmente para encontrar más rápido la puesta a punto óptima en su coche.
Verle 2º en un inicio de Gran Premio, especialmente en Mónaco, puede ser indicativo de lo fuerte que puede estar en comparación al pasado curso y de un progreso en su monoplaza para pelear por el título ante McLaren.
Por su parte, falta ver dónde está el techo de los McLaren.
Son favoritos de nuevo, pero este año se ha demostrado que pueden ser vulnerables en una vuelta y en Mónaco eso es mucho más que medio triunfo.
Norris y Piastri no pueden cometer errores, y de momento, no se les vio cómodos en una sesión en la que todos dejaron claro que estos coches, tan grandes y pesados, en esta pista tan ratonera, son extremadamente difíciles de conducir.
Se vieron pocas vueltas perfectas.
Los pilotos empezaron a tomarle el pulso a la pista y a aclimatarse, acercándose cada vez más a los muros para rozarlos pero no besarlos durante el resto del fin de semana, conscientes de que cualquier milímetro puede ser clave.
De momento, la sesión fue muy accidentada y la lista de toques, sustos, salidas por las pocas escapatorias y chicanes recortadas fue larga.
Norris se salió por la escapatoria de Santa Devota, igual que Sainz.
Verstappen, perdió el coche y casi se choca con Bortoleto en la salida de la piscina.
Albon estuvo a punto de llevarse a Piastri por delante.
Hadjar tocó un poco el interior de la chicane de la piscina, mismo punto en el que al final de la sesión, Hamilton hizo lo propio, perdiendo el control de su coche y pasando por encima de una banana que le hizo volar, literalmente, en una acción en la que el inglés tuvo suerte de no acabar contra las protecciones.
Además, Lewis casi se choca con un Alpine mal colocado en la subida al Casino y Piastri, el líder del Mundial y uno de los favoritos en Mónaco, tocó el muro con la rueda delantera izquierda.
Quizás ese error evitó que Oscar pudiera empezar a demostrar el potencial que se prevé de su coche, especialmente por el crono que marcó con goma media.
También Tsunoda saltó por encima de un piano y se vio una bloqueada de frenada de Norris.
Quedan muchas cosas por pulir en las dos sesiones restantes antes de la clasificación.
Williams empezó bien y Carlos Sainz estuvo entre los mejores durante gran parte de la sesión, aunque finalmente se vio superado por Albon, que fue º y Carlos empezó en el 7º puesto, a medio segundo del mejor.
El Williams, con buen rendimiento en curva lenta y buena tracción, podría ser uno de los candidatos a dar la sorpresa en la clasificación con sus dos pilotos, aspirando a un buen resultado.
Es solo el inicio y Carlos deberá ir ganando confianza entre muros poco a poco para intentar ir a por un Top- complicado pero que no parece imposible.
Fernando Alonso avisaba antes de esta cita que, sobre el papel, "era un fin de semana difícil" porque la principal debilidad de su coche en este inicio de curso era la curva lenta.
Y Mónaco está lleno.
Había que ver cómo mejoraba el coche en ese tipo de virajes con las evoluciones de Imola y Fernando decía que, pese a ello, la Q podía ser posible porque Mónaco es una pista de confianza, de pegarse a los muros, de tomar riesgos y también de manos.
Y de momento, a falta de ver cómo evoluciona el fin de semana, Fernando Alonso empezó cumpliendo su objetivo de estar entre los 1 mejores con un 1º puesto.
Fernando se quedó a "76 del mejor crono, a solo 7 milésimas del Ferrari de un Hamilton que empezó perdido y con varios sustos, y a media décima de Gasly 8º.
y a dos décimas de Sainz 7º.
Mientras, Stroll, tras su incidente inicial con Leclerc, fue último al no volver a salir a pista.
No obstante, la sensación que dejan las vueltas de Fernando es que empezó tomando riesgos desde el inicio y tuvo que domar un coche difícil de conducir al límite, que a veces da sustos sin avisar y que el ovetense tiene que ir corrigiendo sobre la marcha.
Aunque, es cierto que con estos coches tan grandes, todos sufrieron.
Adrian Newey, en su primera vez en el box, deberá ayudar con sus ideas para ir mejorándolo con cambios de reglajes