La carrera de Mónaco podría ser una auténtica quiniela: Alonso sale 6º y puede
Pasar de todo. El asturiano dejaba claro que, con la nueva regla de dos cambios de neumáticos obligatorios en Mónaco, podía ser 4º o º si la fortuna le sonreía (lo dijo cuando aún no sabía que ganaba posición con Hamilton), o quedar fuera de los puntos si ocurría lo contrario en una carrera marcada por el azar
Este domingo, en el GP de Mónaco de F1 22, se estrena la obligación de hacer dos paradas en la carrera del Principado para aumentar la emoción en una cita en la que, con coches tan grandes en calles tan estrechas y entre muros, es muy difícil adelantar.
La falta de incertidumbre en las citas de Mónaco siempre que no llueve, hizo que la F1 impusiera esta nueva norma desde este curso.
Y al no haber ocurrido nunca, las dudas de lo que va a ocurrir son grandes en todos los pilotos.
No hay nadie que esté tranquilo y que pueda predecir lo que va a pasar.
Ni el hombre de la pole, Lando Norris, que de haber salido primero en los años anteriores, hubiera estado muchísimo más seguro de sus opciones de triunfo.
Y es que la mayoría de pilotos y equipos coinciden en que la regla de dos cambios de gomas obligatorios puede convertirse en una auténtica lotería ante el famoso Casino de Montecarlo.
Como elegir un número y color en una de sus ruletas y cruzar los dedos.
Y es que las múltiples combinaciones posibles de estrategia hacen que los escenarios que se puedan dar en carrera sean muy variados y dependan totalmente de la aparición o no de uno o varios coches de seguridad o banderas rojas, que a su vez, son más probables este año: antes, con una estrategia a una parada, todos los pilotos gestionaban neumáticos y para ello, reducían su ritmo.
Sin embargo, al tener que cambiar dos veces de gomas de forma obligatoria, los pilotos podrán apretar mucho más con los neumáticos: a más velocidad, mayor riesgo de accidente.
Así de simple.
Por ello, Fernando Alonso decía que, pase lo que pase, debía estar satisfecho con el trabajo hecho, con su 6 puesto en parrilla.
Y decía algo extraño en él: no podía controlar la carrera y tenerla en mente porque era muy difícil estar al tanto de todas las estrategias del resto de rivales.
Debía fiarse únicamente del equipo, que lo deberá controlar todo desde el muro.
Las mismas dudas mostraba Carlos Sainz, que sale 11.
El madrileño suele conocer sus opciones tras la clasificación.
Pero ayer, ante la prensa española, dejaba claro que aún debía analizarlo con sus ingenieros, sin estar seguro.
¿Parar en la vuelta 1, esperar, defenderse de alguna parada? La decisión estratégica inicial es complicada.
Pero más todavía durante la carrera.
Y es que hay múltiples opciones y muy variadas.
Los que están atrás podrían parar en la primera vuelta, ganar tiempo rodando en aire limpio y esperar a un coche de seguridad que les entregue otra parada gratis para ir hasta el final con un claro beneficio.
Eso puede generar cambios en la clasificación.
En la vuelta 1 creo que pararán los de atrás, que no tienen nada que perder.
Yo, saliendo el 11, prefiero tomar algo de riesgo, porque estamos fuera de posición, comentó Carlos, con ganas de atacar.
Mientras, los pilotos de delante, podrían optar por ir a una estrategia idónea y normal de carrera, porque no pueden jugársela, al tener mucho más que perder que los que parten fuera de posición o más allá del Top-1.
Las dudas llegarán también cuando pare a boxes uno de los pilotos que intenta atacar a otro que está delante.
En Mónaco, las diferencias son pequeñas y es difícil adelantar.
Responder a esa parada y defenderte entrando a boxes en la siguiente vuelta puede meterte en tráfico y entregarle posición a alguien que intente alargar la parada.
En ese caso, un posterior coche de seguridad te haría perder posición.
Así, la suerte juega un papel primordial en esta cita, mayor al resto.
Ojalá nos salga bien y podamos recuperar alguna posición, pero creo que este Top-1 no va a ser el mismo que en carrera, por desgracia.
Me gustaría que Mónaco fuera con las reglas antiguas, así tendría más o menos garantizada la 6 plaza.
Podemos tener suerte y acabar o 4, o mala suerte y acabar fuera de los puntos, dijo Alonso al respecto.
También podría ocurrir todo lo contrario: que todas esas estrategias e incógnitas se terminaran pronto si hay una bandera roja en los primeros giros.
Con bandera roja, los coches pueden cambiar de neumáticos antes de la reanudación.
Eso le quitaría a todos uno de los dos cambios de gomas obligatorios y el escenario volvería a ser el de siempre, con una sola parada más que hacer durante lo que resta de carrera, quitándole toda esa emoción de cuajo, generada de forma artificial mediante esta nueva regla que hoy se pone a prueba